Con metodología Montessori los niños de 2 años continúan formando buenos hábitos de rutinas y participan en actividades para su motricidad fina y gruesa. Empezamos a introducir temas básicos como formas y colores, los niños tienen actividades programadas pero son libres de jugar y descubrir a su propio ritmo. Los infantes complementan sus experiencias vividas en su entorno familiar en un ambiente acogedor que les permite crecer y aprender; a través de diferentes experiencias sensoriales, motrices y emocionales los/as niños/as irán desarrollando todas sus capacidades relacionándose y compartiendo con sus compañeros del grupo de su misma edad. Los niños de dos años son más independientes que los bebés y tienen su recreo en el patio principal, continuamos trabajando las normas de convivencia a diario. Normalmente a los 2 años la profesora ayuda a los infantes a dejar el pañal y dominar sus esfínteres, aunque eso depende de cada niño y puede suceder más temprano en la clase de bebés.

A los 3 años los niños están en transición de ser infantes muy pequeños y empiezan a trabajar el currículo nacional y a participar en nuestros talleres poli docentes, idiomas, música, yoga etc. A partir de los 3 años las aulas tienen rincones de juego para sus horarios libres. Las rutinas de 3 años ayudan a profundizar sus logros adquiridos en el I ciclo y adquirir mayores aprendizajes básicos que los utilizará durante toda su vida. Los niños son más autónomos y tienen mayores destrezas, es por eso que la institución les brinda herramientas para potencializar sus habilidades tanto en sus desarrollos motores, sensoriales y cognitivos. La imaginación y la fantasía se hallan presentes en esta edad para lo cual nuestras docentes utilizan actividades, dinámicas, canciones y material motivador para lograr aprendizajes significativos. Es la edad crucial para adquirir conocimientos básicos que los prepara para enfrentar la vida diaria, por eso nos preocupamos de brindarles una base sólida.

Los niños a los 4 años ya tienen sus rutinas bastante establecidas, seguimos trabajando el currículo nacional con nuestra metodología peruano-europeo y los infantes tienen mayor atención en los talleres. A los 4 años los niños son bastante hábiles y gozan de estar en el jardín con sus compañeros. Se hace un trabajo integral que comprende todas las áreas: Lenguaje, matemática, ciencias y motoras finas y gruesas, con actividades muy vivenciales que permiten la adquisición inmediata de nuevos aprendizajes. Es la edad donde aprenden a ser más independientes, a tener preguntas sobre todos sus inquietudes, es por eso que los docentes deben tener respuestas certeras ya que les estamos enseñando a pensar y ayudando a formar las bases de su visión del mundo. Con nuestro lema ¨Aprendemos jugando¨ ponemos en práctica diferentes actividades dinámicas, actividades psicomotrices y actividades de representación que ayudan en esta edad a multiplicar y potenciar sus posibilidades cognitivas, lingüísticas, motoras y sociales.

Culminamos el trabajo del currículo nacional: En el área de lenguaje avanzamos con vocales, letras y sílabas; dando herramientas de lecto-escritura a los niños antes de egresar, ayudamos en el trabajo de la conciencia fonológica como paso previo a la lecto-escritura y utilizamos herramientas novedosas para el trabajo sistemático de praxis vocálica que les ayuda en la buena pronunciación de los diferentes sonidos. Nuestro trabajo de las matemáticas tiene una metodología más vivencial y manipulativa con material sensorial y reciclado, de tal manera que se consigue un aprendizaje más significativo con el que construir y llevar a nuevos conocimientos. En el área de ciencias demuestran todos sus potenciales de investigadores, hacen inferencias y resuelven problemas de acuerdo a su edad, utilizando bases científicas, ensayo – error hasta llegar a construir sus aprendizajes. Para nosotros es importante la educación integral de nuestros infantes por eso brindamos actividades complementarias para desarrollar sus razonamientos mentales, emocionales y motrices. Nuestros alumnos más grandes aprenden a ser más responsables, reafirman su autoestima y encontrar seguridad porque desde pequeños han sabido expresarse a través de sus exposiciones, tienen buenos hábitos formados que les servirá para toda la vida. Los niños acabando 5 años en los talleres de idiomas tienen un vocabulario de 100 palabras en inglés y quechua.